Las altas temperaturas, los fuertes vientos y la baja humedad no han dado tregua al centro-sur de Chile, afectado por una ola de incendios forestales desde hace una semana. Los focos en combate han llegado a 90 -al inicio de la emergencia eran 22-, según el informe del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred). El número de víctimas fatales se mantiene en 24 luego de una corrección a la baja de dos personas. El Gobierno de Gabriel Boric ha decretado a partir de hoy toque de queda en algunos municipios afectados. “Van a ser días muy difíciles, no nos acompañan las condiciones climáticas”, advirtió el presidente chileno. Las llamas ya han arrasado con más de 360.000 hectáreas y 28 personas han sido detenidas por su presunta responsabilidad en la generación de incendios.
A nivel nacional hay 323 incendios forestales en desarrollo. De ellos, 90 están en combate, 186 controlados, cuatro extintos y 46 bajo observación o en trayecto, según datos proveídos por Christian Little, director de la Corporación Nacional Forestal de Chile (CONAF).
Desde hoy comenzó a regir el toque de queda en localidades de las zonas donde se ha decretado estado de excepción constitucional de catástrofe: Ñuble, Biobío y la Araucanía (ubicadas a 400, 500 y 700 kilómetros al sur de Santiago, respectivamente). La Administración de Boric justificó la medida para garantizar la seguridad de las familias afectadas y facilitar el trabajo de los miles de brigadistas y bomberos. El fin de semana se espera que las temperaturas bajen -han llegado hasta los 40 grados- y marquen en torno a los 30, lo que suele ser el verano en el centro-sur.
El subsecretario Monsalve ha informado esta tarde que 28 personas han sido detenidas por su eventual participación en el origen de las llamas. La mayoría de ellos por indicios de acciones negligentes que derivaron en un incendio.
Los damnificados por la ola de incendios más mortífera en una década en el país sudamericano superan los 5.500. Las viviendas destruidas alcanzan las 1.200 y 800 están en evaluación. La portavoz de gobierno, Camila Vallejo, junto a la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Perales, anunciaron esta mañana el Plan de Recuperación y Ayudas Tempranas que contiene 13 medidas para apoyar a las víctimas de la emergencia. Entre ellas figura un bono de 1.900 dólares a las familias más afectadas y de 1.250 a las afectadas mediana o levemente. También viviendas transitorias “dignas”, con instalación eléctrica, agua potable y alcantarillado.