El alcalde mexicano de Malinaltepec, estado de Guerrero, Acasio Flores Guerrero, fue asesinado tras ser retenido por pobladores en una comunidad a la que acudió a inaugurar una obra pública.
La Fiscalía General del Estado (FGE), abrió una investigación por homicidio calificado, relató que el pasado jueves el alcalde acudió a la colonia (vecindario) Guadalupe y nunca más regresó.
Fue a la comunidad Alacatlatzala, a inaugurar una obra pública cuando, siendo retenido por pobladores inconformes que reprochaban obras incumplidas a meses de cerrar su gestión.
Desde ese momento su esposa, Deyanira Bernardino Arzate, pidió ayuda de las autoridades para liberarlo.
Camino bloqueado por rocas
La Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero informó que acudió al lugar con agentes del Ejército mexicano y de la Guardia Nacional, además de representantes de la Secretaría General de Gobierno y la Comisión de Derechos Humanos pero el camino estaba bloqueado con rocas.
La primera versión de la muerte del alcalde se dio a conocer mediante un boletín firmado por la Comisaria de Bienes Comunales y los comuneros de Alacatlatzala, en el que se apuntó que habría sido asesinado el jueves.
“Flores Guerrero se presentó a las 18:30 horas del jueves para inaugurar una obra social. Al parecer un grupo de persona lo esperaba y después de un forcejeo, con sus acompañantes, fue privado de la vida. El fondo del asunto se desconoce”, se informó.
También se deslindaron del hecho y aseguraron que no tiene relación con el conflicto agrario que existe desde hace años entre Malinaltepec y la comunidad de Alacatlatzala ya que siempre han respetado a sus autoridades aunque no sean afines.
Por la noche del viernes el gobierno municipal de Malinaltepec informó de los hechos en un comunicado, pidió todo el peso de la ley y dijo que es un delito que no debe quedar impune.
De manera extraoficial se informó que el cuerpo de Flores Guerrero fue encontrado en su camioneta, sobre la carretera Tlapa-Marquelia.