Gracie Bon, una influyente figura en las redes sociales conocida por sus curvas pronunciadas y su belleza, reveló que optó por viajar en jets privados debido a las dificultades que sufrió en los vuelos comerciales.
Con más de nueve millones de seguidores, compartió abiertamente su experiencia. Esto originó cierta controversia en torno a la accesibilidad y la comodidad en la industria de la aviación para personas de tallas grandes. Bon explicó que, debido a su figura, tuvo que comprar múltiples asientos en vuelos comerciales para garantizar su comodidad. A pesar de haber iniciado una campaña para solicitar asientos más amplios, sus peticiones no fueron atendidas por las aerolíneas. Como consecuencia, decidió que la única solución viable para sus viajes es alquilar un jet privado.
Experiencia en un jet privado
En un video reciente, la influencer documentó su experiencia a bordo de un jet privado, mostrando el lujo y la comodidad que ofrece este tipo de transporte. Desde la posibilidad de ordenar múltiples comidas hasta la oportunidad de descansar en un sofá durante horas. Bon destacó las marcadas diferencias entre viajar en un jet privado y en un vuelo comercial. Sin embargo, reconoció que incluso en un jet privado encontró un pequeño inconveniente: el tamaño del baño, que considera demasiado pequeño para su figura.
A lo largo de su carrera como influencer, Bon defendió constantemente su cuerpo, negando haber recurrido a cirugías plásticas y asegurando que sus curvas son completamente naturales. A pesar de recibir numerosos elogios por su apariencia, también se enfrentó a críticas y comentarios negativos de parte de los llamados «haters«, quienes cuestionan la autenticidad de su figura.
Gracie Bon ahora vuela en avión privado y lo muestra en sus redes sociales.
La influencer respondió a estas críticas reafirmando su confianza en sí misma y en su cuerpo. Bon expresó en múltiples ocasiones que su cuerpo es tal como Dios lo creó y que no tiene por qué avergonzarse de él. Así y todo, en 2023 compartió un video en sus redes sociales donde expresaba su frustración por la falta de opciones de asientos adecuados en los vuelos comerciales. En la filmación se la veía caminando por un aeropuerto, enfatizando la necesidad de que las aerolíneas ofrezcan asientos más amplios para personas de tallas grandes.
Si bien muchos usuarios mostraron empatía con su situación y apoyaron su iniciativa, otros la criticaron, argumentando que su tamaño corporal era una elección personal y que debería asumir las consecuencias. Algunos incluso sugirieron que se había sometido a cirugías para aumentar sus curvas y que por lo tanto, debería buscar soluciones alternativas.