Este martes, Hunter Biden, el hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue declarado culpable de mentir sobre su consumo de drogas para comprar ilegalmente un arma.
Un jurado en el tribunal federal en Wilmington, Delaware, lo encontró responsable de los tres cargos en su contra.
Precisamente, horas después de conocerse el fallo este martes, el presidente Biden viajó a Delaware y a su llegada a la base de la Guardia Nacional Aérea se encontró con su hijo Hunter.
Poco antes, el mandatario había señalado en un comunicado que respetaba el proceso judicial, aunque resaltó que es «el presidente, pero también soy padre».
Presidente Joe Biden
El polémico caso, que podría ser utilizado por los republicanos para la campaña presidencial, fue presentado por el fiscal especial del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La exesposa, la exnovia y la cuñada de Hunter Biden ofrecieron relatos de primera mano de su adicción en las semanas previas y posteriores a que comprara el arma en octubre de 2018.
Sumado a esto, los elementos probatorios de la Fiscalía incluían mensajes de texto, fotografías y registros bancarios que, según dijeron.
Los fiscales señalaron que Hunter violó la ley al responder «no» a ser un consumidor de drogas en un formulario de evaluación del gobierno.
Los cargos
Por estos cargos, Hunter Biden podría enfrentar una pena de hasta 25 años de prisión, aunque se espera una sentencia más leve, incluso sin cárcel.
El fiscal Weiss también acusó a Hunter Biden de tres delitos graves y seis delitos fiscales menores en California.
En este otro caso, la acusación señala que el primogénito del presidente no pagó 1,4 millones de dólares en impuestos entre 2016 y 2019.
Aunque Hunter Biden se ha declarado inocente de esos cargos, el juicio sobre este caso está previsto para el 5 de septiembre en Los Ángeles.