El expresidente de México Felipe Calderón (2006-2012) se desmarcó este martes del exsecretario de Seguridad, Genaro García Luna, declarado culpable de narcotráfico por un jurado estadounidense, al asegurar que él «jamás» entabló tratos con la delincuencia.
«Jamás negocié ni pacté con criminales. Jamás usé la investidura presidencial para abogar por sus intereses», dijo en Twitter Calderón, del Partido Acción Nacional (derecha).
García Luna es considerado como el arquitecto de la guerra contra la droga que lanzó Calderón en su gobierno, que ha dejado hasta la fecha unos 340.000 muertos, la mayoría atribuidos al crimen organizado.
Calderón sostuvo que «en un entorno de polarización y hostigamiento, la decisión (del jurado de Estados Unidos) está siendo ya usada políticamente» en su contra.
«Especialmente por quienes cuestionaron la decisión de mi gobierno de actuar en contra de la delincuencia», prosiguió el expresidente.
El exministro García Luna fue declarado culpable este martes por un jurado de Nueva York de participar en empresa criminal continuada, conspiración para distribuir, poseer e importar cocaína y falsedad documental.
Al respecto, el gobierno del presidente de izquierda Andrés Manuel López Obrador consideró que con el veredicto se hizo «justicia».
«La justicia ha llegado para quien fuera escudero» de Calderón, escribió en Twitter el vocero presidencial Jesús Ramírez.
El exfuncionario de más alto rango que se sienta en el banquillo de la justicia estadounidense fue acusado de proteger al Cartel de Sinaloa de Joaquín «Chapo» Guzmán a cambio de millonarios sobornos para enviar droga a Estados Unidos desde 2001 a 2012.
«Combatí a todos los que amenazan a México, incluyendo por supuesto, al llamado Cartel del Pacífico», dijo Calderón sobre el también conocido como Cartel de Sinaloa.
La sentencia para García Luna se conocerá el 27 de junio. La defensa tiene ahora 45 días para apelar el fallo del jurado.
El gobierno de México, que ha pedido a Estados Unidos su extradición, también reclama 700 millones de dólares presuntamente malversados por el exsecretario de Seguridad Pública.