El enviado del presidente de Estados Unidos, Richard Grenell, se reunió la tarde del viernes con el gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, en Caracas.
De acuerdo a un comunicado del gobierno venezolano, la reunión “se realizó en el marco del respeto mutuo», y se abordaron temas sobre «migración, impacto negativo de las sanciones económicas contra Venezuela, ciudadanos estadounidenses incursos en delitos en territorio nacional e integridad del sistema político venezolano”.
“Se ratificó además la necesidad de darle un giro a las relaciones»,
precisó el texto en el que el gobierno ratificó su disposición de mantener los canales diplomáticos abiertos con los Estados Unidos, «en la defensa de los derechos e intereses irrenunciables del pueblo venezolano”.
Nicolás Maduro aboga por un «nuevo comienzo» con EE.UU tras visita de enviado de TrumpPoco antes del encuentro, Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca detalló que Grenell estaba en Venezuela «con dos directivas inmediatas del presidente de EEUU… garantizar que los vuelos de repatriación de los ciudadanos venezolanos que han violado las leyes de nuestro país aterricen en Venezuela…
La portavoz reiteró que es la intención del gobierno estadounidense hacer que todos los países «cooperen» con la deportación de sus ciudadanos que están indocumentados en EEUU.
Leavitt detalló que unos 400 miembros de la banda criminal venezolana, Tren de Aragua, están en custodia de las autoridades estadounidenses.
El enviado especial de Trump a Latinoamérica, Mauricio Claver-Carone, insistió más temprano en que no se trata de una negociación, sino que Grenell trasmitirá el mensaje de la administración.
“Esto no es una negociación, esto es trasladar un mensaje inequívoco sobre dos puntos: uno, los criminales venezolanos, de la pandilla del Tren de Aragua que tienen que ser deportados, Venezuela los tienen que aceptar, es su responsabilidad, eso no es negociable”,
dijo Claver-Carone el viernes en una llamada con periodistas
La semana pasada, Grenell, anunció que había hablado con varios funcionarios en Venezuela, pero no ofreció detalles sobre los temas abordados.
Nicolás Maduro
«La diplomacia ha vuelto», dijo Grenell en una publicación en X que revelaba sus llamadas iniciales. «Hablar es una táctica», subrayó.
El ministro de Comunicaciones de Venezuela, Freddy Ñañez, replicó en su canal de Telegram una confirmación de la reunión de Grenell con Maduro, quien propondría al enviado una «agenda cero» para tratar con la administración Trump.
El senador republicano, Rick Scott, dijo esperar que durante su visita en «lo único» en lo que se centre Grenell sea en exigir el regreso de estadounidenses «secuestrados» en territorio venezolano, y asegurar que Maduro retorne a su país a «matones y miembros de pandillas» que se encuentran en EEUU
«Y encontrar un nuevo país para que Maduro, Diosdado (Cabello) y todos los involucrados en este régimen asesino se vayan lo antes posible», escribió Scott en X.
No está claro cuántos estadounidenses o ciudadanos con doble nacionalidad están detenidos en Venezuela, pero funcionarios venezolanos han hablado públicamente sobre al menos nueve.
Los funcionarios de Maduro han acusado a la mayoría de ellos de terrorismo y han dicho que algunos eran «mercenarios» de alto nivel.
Venezuela ha acusado regularmente a miembros de la oposición y detenidos extranjeros de conspirar con entidades estadounidenses como la CIA para planificar ataques terroristas.