Residentes de las zonas afectadas por el huracán Rafael en Cuba dicen que la tormenta causó cuantiosos daños y que no han tenido respaldo de las autoridades. La alimentación es una preocupación para los residentes en toda la isla.
La situación es muy compleja en el poblado de Güira de Melena, como informa la residente de esa localidad, Marta Domínguez.
“Gracias a Dios estamos vivos, eso fue horrible, acabó con Güira, la mitad de las personas no tienen techo, esto es una destrucción total y todavía, a esta altura, nadie del gobierno se ha reportado a ver qué es lo que ha pasado, en qué condiciones se encuentran las personas. Hay que verlo y vivirlo para saber el sufrimiento de las personas”, declaró.
“Alimentación ninguna, aquí no quedó nada, ahora así el hambre va a matar a Cuba”, dijo la madre del periodista encarcelado Jorge Bello Domínguez.
En Cabañas, en Artemisa, el escenario es desastroso, declaró a Martí Noticias el activista Moisés Leonardo Rodríguez.
“Esta vez por su magnitud y por la falta de preparación, ha sido desastroso lo que ha ocurrido aquí en Cabañas. Estamos sin techo, arrancó con marco y todo una puerta de la parte trasera. Todo lo que había sembrado, arrasó…”, dijo el activista residente en esa localidad del municipio Mariel.
“Aquí no ha venido nadie, una viejita de una casa a la que el huracán le llevó el techo, una señora ya de casi 90 años. ¿Quiénes fueron a rescatarlas en medio del ciclón? Los vecinos. Porque eso sí, ¡qué clase solidaridad la de los cubanos! y eso no es nuevo, no es gracias a la revolución”, apuntó el opositor.
Cuba y los huracanes
En menos de un mes Cuba sufrió el impacto de dos huracanes: Oscar y Rafael, en el caso de Rafael de acuerdo con versiones extraoficiales, el fenómeno dejó más de 400 derrumbes y fallas en el servicio de electricidad tanto en La Habana, como en otras partes de la isla.
Con información de Martí Noticias