El rapero Sean «Diddy» Combs enfrenta un complicado panorama legal que podría llevarlo a prisión por varios años. Este jueves, se presentó ante un tribunal federal en Manhattan, donde el juez Arun Subramanian supervisó una audiencia clave relacionada con los cargos de tráfico sexual y crimen organizado que pesan sobre él. Aunque la investigación se encuentra en una etapa avanzad, los fiscales sugirieron que una nueva acusación podría retrasar el inicio del juicio.
El proceso judicial tiene fecha para el 5 de mayo de 2025, y se espera que el juicio dure alrededor de tres semanas, según la estimación de la fiscalía. Por su parte, la defensa de Combs anticipa que su presentación durará una semana. El descubrimiento de pruebas deberá completarse antes del 31 de diciembre, lo que permitirá definir con mayor claridad los elementos del caso.
Si es declarado culpable, el rapero podría enfrentar una sentencia significativa en prisión, con cargos tan graves que podrían afectar su libertad por un largo periodo.
La posible sentencia que enfrenta Diddy Combs
Sean «Diddy» Combs, de 54 años, podría enfrentar una condena mínima de 15 años hasta cadena perpetua si es declarado culpable de los cargos de conspiración con fines de extorsión, tráfico sexual y transporte ilegal para facilitar estos crímenes. Aunque la cadena perpetua no está descartada, será el resultado del juicio el que defina su destino.
Según las acusaciones, Combs habría utilizado su sello discográfico Bad Boy Entertainment para transportar personas a través de fronteras estatales, con el objetivo de participar en eventos sexuales filmados, conocidos como «Freak Offs». A pesar de las serias acusaciones, el rapero se declaró inocente.
El caso, liderado por la fiscal Emily Johnson, incluirá los testimonios de numerosas víctimas que han denunciado años de abusos sexuales, psicológicos y físicos, así como amenazas para silenciarlas.
Acusaciones de filtración de pruebas por parte del Gobierno
El equipo legal de Sean «Diddy» Combs ha presentado una moción ante la corte del Distrito Sur de Nueva York, acusando al Gobierno de Estados Unidos de filtrar videos clave a la prensa que podrían ser utilizados como pruebas en su juicio.
Entre los videos filtrados, destaca una grabación de 2016 captada por una cámara de seguridad en un hotel, en la que se observa a Combs golpeando y arrastrando a su exnovia, Cassie Ventura. Este material fue recientemente difundido por CNN, lo que ha generado una controversia significativa en el caso.
Los abogados de Combs argumentan que la filtración compromete el derecho del rapero a un juicio justo, ya que podría predisponer negativamente al jurado. Aunque la defensa ha señalado a agentes del Departamento de Seguridad Nacional como responsables de la filtración, aún no se han presentado pruebas concretas que respalden estas acusaciones.