La pandilla venezolana conocida como Tren de Aragua está expandiendo sus operaciones en Estados Unidos, incluyendo la ciudad de Nueva York, según reportes policiales
Esta organización, que surgió de una prisión en Venezuela, se ha convertido en una creciente preocupación para los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en todo el país.
El Departamento de Policía dijo que la banda está detrás de una serie de robos en comercios minoristas, y que se ha centrado en productos de gama alta en grandes almacenes. La policía también ha relacionado al Tren de Aragua con robos con vehículos que, según las autoridades, los miembros de la banda cometen en scooters o patinetes, arrebatando teléfonos móviles y relojes caros a la gente en la calle.
Tren de Aragua: origen de la pandilla
El Tren de Aragua, que se originó en la prisión de Tocorón en el estado venezolano de Aragua, se dedica principalmente al tráfico sexual, contrabando de personas y narcotráfico.
Delitos atribuidos al Tren de Aragua en NY
En Nueva York, el Departamento de Policía ha relacionado al Tren de Aragua con una serie de delitos, incluyendo:
- Robos en tiendas minoristas, especialmente de productos de alta gama en grandes almacenes.
- Asaltos en motonetas, donde arrebatan teléfonos celulares y relojes caros a transeúntes.
- Tráfico de una droga sintética en polvo rosa conocida como Tusi, a menudo mezclada con ketamina, MDMA o fentanilo.
Hasta el momento, 24 miembros han sido registrados en la base de datos de pandillas criminales de la ciudad, que contiene información sobre 14,000 miembros de 496 pandillas.
Sin embargo, las autoridades creen que el número real de miembros del Tren de Aragua es significativamente mayor.
Alcalde reporta aumento en robos de scooters
El alcalde Eric Adams, un líder demócrata, ha dicho que se ha producido un aumento de los robos en patinete desde que hace dos años empezaron a llegar más inmigrantes a la ciudad. La policía informó de 415 incidentes a principios de junio. Hasta el 10 de septiembre, esa cifra se había duplicado, según Joseph Kenny, jefe de detectives del Departamento de Policía.