Familiares de tres de los seis trabajadores latinos de la construcción murieron el 26 de marzo al derrumbarse el puente Francis Scott Key en Baltimore (Maryland) interpondrán acciones legales contra la propietaria del carguero que chocó contra la infraestructura y que provocó el colapso, según dijeron el martes en una rueda de prensa.
Las familias demandarán a Grace Ocean Private Limited, compañía con sede en Singapur propietaria del buque Dali, que chocó contra el puente tras quedarse sin energía. Ocho trabajadores migrantes que hacían tareas de mantenimiento en la infraestructura cayeron al agua y seis de ellos perdieron la vida.
Si la demanda es admitida por la corte federal de distrito de Maryland, las familias podrían solicitar una indemnización por la pérdida de sus seres queridos, explicó el abogado Matthew Wessler.
Puente de Baltimore
“Todos ellos han sufrido una tragedia inimaginable, al perder a sus seres queridos, ya sea una de nuestras clientes que perdió a su marido y compañero. Otra que perdió a su hijo”
, explicó Wessler
La demanda se interpondrá en nombre de las familias de Miguel Ángel Luna González, José Maynor López Sandoval y Dorlian Ronial Castillo Cabrera, tres de los trabajadores que fallecieron en marzo.
Trabajadores inmigrantes latinos murieron en el puente
Un grupo de seis trabajadores inmigrantes latinos murieron la semana pasada mientras trabajaban en el colapsado puente Francis Scott Key de Baltimore. Cuando comiencen las obras para reconstruirlo, es casi seguro que más inmigrantes latinos se unirán a los trabajos por reabrir la crucial arteria de transporte.
Según la Oficina de Estadísticas Laborales de EE.UU., los trabajadores latinos representan aproximadamente un tercio del sector de la construcción en Estados Unidos, lo que supone una enorme sobrerrepresentación si se tiene en cuenta que solo representan el 19% de la población total estadounidense y el 17,6% de su mano de obra.
Foto: AFPMás de dos tercios de los trabajadores hispanos de la construcción en Estados Unidos nacieron en el extranjero. Para los millones de inmigrantes latinos recientes en EE.UU., los trabajos en la construcción tienen pocas barreras de entrada y las vacantes son abundantes. Los empleos estables en la construcción también pueden permitir un camino hacia el crecimiento personal.
