La encefalitis equina oriental, una enfermedad rara pero grave, ha puesto en alerta a casi una docena de comunidades en Massachusetts. Este virus, transmitido por mosquitos, tiene una tasa de mortalidad del 30% y muchos de los que sobreviven enfrentan problemas neurológicos persistentes.
Las autoridades sanitarias del estado confirmaron recientemente el primer caso humano del virus en lo que va del año: un hombre de unos 80 años, que fue expuesto en el condado de Worcester, al oeste de Boston.
Debido al riesgo elevado, diez comunidades han sido clasificadas como de alto o crítico riesgo por el virus. Como resultado, algunas ciudades han tomado medidas preventivas drásticas.
En Plymouth, a aproximadamente 65 kilómetros al sur de Boston, todos los parques y áreas públicas están cerrados desde el anochecer hasta el amanecer. En Oxford, una ciudad cercana, se ha prohibido cualquier actividad al aire libre en las propiedades municipales después de las 6 de la tarde.
Con el recuerdo de la pandemia fresca
La idea de restringir las actividades al aire libre cerca del atardecer para proteger a la población de un virus mortal transmitido por mosquitos no es nueva. Sin embargo, la reacción pública a esta medida este año sí es notablemente diferente.
En los años 2005, 2012 y 2019, durante brotes de encefalitis equina oriental (EEE), tanto Massachusetts como Connecticut solicitaron a los residentes que redujeran sus actividades al aire libre sin mucha controversia.
Las autoridades de Oxford, Massachusetts, implementaron un toque de queda voluntario y recomendaron a los residentes que finalizaran sus actividades al aire libre antes de las 6 de la tarde hasta finales de septiembre, y a las 5 de la tarde en octubre hasta la primera helada fuerte, se generó descontento entre algunos ciudadanos.
Aproximadamente 200 personas asistieron a una reunión municipal para discutir la nueva medida.
Reportan más casos cada año
La encefalitis equina oriental es causada por un virus que se transmite a los humanos a través de la picadura de mosquitos infectados. Este virus puede llegar al cerebro, causando inflamación o hinchazón. Los síntomas iniciales pueden incluir dolor de cabeza repentino, fiebre alta, escalofríos y vómitos, que pueden evolucionar a desorientación, convulsiones y coma. Los casos graves son raros.
Cada año se reportan alrededor de 11 infecciones humanas en los EE.UU., según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Este año, se han registrado cuatro casos: uno en Massachusetts, uno en Wisconsin, uno en Nueva Jersey y uno en Vermont. Además, el martes, las autoridades de salud de New Hampshire informaron la muerte de una persona hospitalizada con el virus.
Los mosquitos que transmiten la EEE son más activos durante el anochecer y el amanecer.
«La decisión de imponer un toque de queda desde el anochecer hasta el amanecer no se toma a la ligera por los departamentos de salud locales y estatales», afirmó la doctora Kristy Murray, experta en virus transmitidos por mosquitos de la Universidad de Emory.