El huracán Beryl se fortaleció hasta convertirse en una tormenta de categoría 5 el lunes por la noche después de arrasar varias islas en el sureste del Caribe, provocando fuertes lluvias y desatando vientos devastadores.
Beryl es ahora la tormenta de categoría 5 más temprana registrada en el Atlántico y se ha convertido en un huracán «potencialmente catastrófico» con vientos máximos sostenidos de 160 millas (260 kilómetros) por hora, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
Temprano en el día, la isla Carriacou de Granada recibió un impacto directo del «ojo extremadamente peligroso» de la tormenta, con vientos sostenidos de más de 150 millas, dijo el NHC.
Las islas cercanas, incluidas San Vicente y las Granadinas, también experimentaron «vientos catastróficos y marejadas ciclónicas potencialmente mortales«, según el NHC.
«En media hora, Carriacou quedó arrasada», dijo el primer ministro de Granada, Dickon Mitchell, en una conferencia de prensa «Aún no estamos fuera de peligro», añadió Mitchell, señalando que si bien hasta el momento no se habían reportado muertes, no podía decir con certeza que no se hubiera producido ninguna.
Más tarde en las redes sociales, Mitchell dijo que el gobierno estaba trabajando para llevar suministros de socorro tanto a Carriacou como a la isla de Petite Martinique el martes.
«El estado de emergencia sigue vigente. Permanezcan en sus casas», escribió en Facebook.
Rara tormenta temprana y fuerte
Beryl se convirtió el sábado en el primer huracán de la temporada atlántica de 2024 y rápidamente ganó fuerza.
Los expertos dicen que es extremadamente raro que se forme una tormenta tan poderosa a principios de la temporada de huracanes del Atlántico (que va desde principios de junio hasta finales de noviembre).
Es el primer huracán desde que comenzaron los registros del NHC que alcanza el nivel de categoría 4 en junio, y el primero en alcanzar la categoría 5 en julio.
«Solo se han registrado cinco huracanes importantes (de categoría 3+) en el Atlántico antes de la primera semana de julio», publicó el experto en huracanes Michael Lowry en la plataforma de redes sociales X.
Barbados parecía haberse librado de lo peor de la tormenta, pero aún así sufrió fuertes vientos y lluvias torrenciales, aunque las autoridades no informaron heridos hasta el momento.
Barbados parece haber «esquivado una bala», dijo el Ministro del Interior e Información, Wilfred Abrahams, en un vídeo online, pero no obstante «las ráfagas siguen llegando, los vientos con fuerza de tormenta siguen llegando», dijo.
En algunas zonas se inundaron viviendas y negocios y en Bridgetown los barcos pesqueros resultaron dañados.
La tormenta provocó la cancelación de clases el lunes en varias de las islas, mientras que una reunión esta semana en Granada del bloque regional caribeño CARICOM fue pospuesta.
Jamaica ha emitido una alerta de huracán, ante la llegada prevista de la tormenta el miércoles. El NHC también advirtió a las Islas Caimán y a las zonas de la península de Yucatán que sigan de cerca el avance de la tormenta.
Clima extremo
Un huracán de categoría 3 o superior en la escala Saffir-Simpson se considera un huracán importante.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos dijo a finales de mayo que espera que este año sea una temporada de huracanes «extraordinaria», con hasta siete tormentas de categoría 3 o superior.
La agencia citó las cálidas temperaturas del Océano Atlántico y las condiciones relacionadas con el fenómeno meteorológico La Niña en el Pacífico como causantes del esperado aumento de tormentas.