La biopsia realizada en febrero al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó que una lesión cutánea extirpada de su pecho era un carcinoma basocelular y que todo el tejido canceroso había sido extirpado con éxito, así lo informó el médico de la Casa Blanca, Kevin O’Connor.
O’Connor agrego que el sitio donde le extirparon la biopsia se ha curado por completo y no es necesario ningún tratamiento adicional, pero sí el presidente seguirá con la vigilancia dermatológica como parte de su atención médica en curso.
“Todo el tejido canceroso se eliminó con éxito” durante el examen físico anual del presidente, el 16 de febrero, y no se requiere más tratamiento después de que la herida se curara bien»
añadió el doctor.