Un tribunal de Belarús condenó este viernes 3 de marzo al ganador del Premio Nobel de la Paz 2022, Ales Bialiatski, a 10 años de prisión, bajo cargos de supuesto “contrabando de dinero” para financiar las históricas protestas contra la cuestionada reelección del presidente Alexander Lukashenko en 2020. Minsk es acusado por la comunidad internacional de reprimir y encarcelar a sus opositores.
Sentencia
Las autoridades bielorrusas dictaron este viernes 3 de marzo una pena de 10 años de cárcel contra el veterano activista Ales Bialiatski, ganador del Premio Nobel de Paz 2022 y fundador del grupo de derechos humanos Viasna, el más destacado de la nación exsoviética.
Bialiatski se encontraba en el banquillo de los acusados junto a dos activistas más, Valentin Stefanovich y Vladimir Labkovich, después de que fueran encarcelados tras las históricas manifestaciones contra la cuestionada reelección en 2020 del presidente Alexander Lukashenko.
Stefanovich recibió una condena de nueve años de prisión, mientras que Labkovich fue sentenciado a siete años tras las rejas.
Los tres, que se declararon inocentes durante una audiencia en enero de 2022, fueron señalados de “contrabandear dinero en efectivo” para supuestamente financiar actividades de oposición, informó la ONG que Bialiatski fundó en 1996.
Acto flagrante de injusticia
Así calificó Amnistía internacional el juicio contra los tres hombres que defienden los derechos humanos. La organización agregó que su condena es una “venganza por su activismo”.
Bialiatski estuvo entre los tres co-receptores del Premio Nobel de la Paz en 2022, junto a un grupo de derechos humanos ruso y otro ucraniano.
El laureado de 60 años fundó Viasna poco después de que Lukashenko se convirtiera en el primer presidente de la Belarús independiente, en 1994.
En 2011, el activista fue detenido y permaneció tras las rejas durante tres años por supuesta evasión de impuestos. Sin embargo, fue ampliamente visto como un arresto por motivaciones políticas a raíz de sus críticas a otra elección previa de Lukashenko, el hombre que más tiempo ha permanecido en la Presidencia de un país europeo.